El tema del Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo para 2014 es para la OIT «La seguridad y la salud en el uso de productos químicos en el trabajo «. Los productos químicos son esenciales para la vida moderna, y continuarán siendo producidos y utilizados en los centros de trabajo. Coordinando esfuerzos, los gobiernos, empleadores, y trabajadores, y sus organizaciones, pueden lograr la gestión racional de los productos químicos para obtener un balance adecuado entre los beneficios de su uso y las medidas de prevención y control de los posibles impactos adversos en los trabajadores, los centros de trabajo, las comunidades y el medio ambiente.
Los productos químicos en el entrono de trabajo y la exposición al riesgo
La producción y el uso de productos químicos en los lugares de trabajo de todo el mundo presentan uno de los desafíos más significativos para los programas de protección en el lugar de trabajo. Los productos químicos son esenciales para la vida, y sus beneficios son generalizados y altamente reconocidos, de ahí su uso común.Los productos químicos son también una parte considerable de muchos procesos industriales para desarrollar productos. Sin embargo, el control de las exposiciones a estos químicos en el lugar de trabajo, así como la limitación de las emisiones al medio ambiente, son tareas que los gobiernos, empleadores y trabajadores continúan esforzándose en abordar. Lo que crea el dilema son los riesgos asociados con la exposición a estos productos químicos. Los productos químicos presentan un amplio rango de efectos potencialmente adversos, desde los riesgos para la salud tal como la carcinogenicidad, y los riesgos físicos como la inflamabilidad, hasta los riesgos ambientales, tales como la contaminación generalizada y la toxicidad en la vida acuática.
El riesgo químico en coordinación de actividades empresariales
Los trabajadores que están directamente expuestos a las sustancias peligrosas, deben tener derecho a trabajar en un entorno seguro y saludable, y a estar debidamente informados, capacitados y protegidos. Una de las claves de actuación preventiva en este sentido es la información que recibe el trabajador que va a estar expuesto a un riesgo químico, bien sea un riesgo inherente al centro, a las actividades concurrentes o a la propia actividad a ejecutar. Por este motivo previo al inicio de los trabajos:
– El empresario titular habrá informado a sus empresas contratistas de los riesgos higiénicos propios del centro de trabajo, las medidas establecidas referidas a la prevención de tales riesgos y las medidas de actuación emergencia química; siendo responsabilidad del empresario contratista de transmitir toda esta información a sus trabajadores.
– El contratista debería informar al empresario principal sobre los riesgos químicos específicos del puesto de trabajo y de las medidas de protección asociadas a los mismos en base a lo indicado en los procedimientos de trabajo establecidos. Esta información se debería cumplimentar:
a) Los manuales de instrucciones de máquinas y equipos a utilizar.
b) Las instrucciones de los equipos de protección individual requeridos para el riesgo químico
c) Las fichas de seguridad de los productos químicos utilizados.
– Analizada toda la información recibida, el empresario titular deberá de planificar trabajos para evitar sinergias de riesgos concurrentes y establecer planes de actuación preventivos. Estas acciones conjuntas (empresario/contratas) se derivarán en la elaboración de instrucciones de trabajo que indiquen claramente los riesgos del puesto y las medidas y normas de seguridad adoptadas en cada caso.
– Por último en base al deber de vigilancia del empresario principal, este deberá asegurar el cumplimiento, por parte de las empresas contratistas de las instrucciones indicadas y medidas a aplicar. De igual forma, en virtud de este deber de vigilancia el empresario podrá detectar necesidades de mejora en su proceso.
Fuente: Organización Internacional del Trabajo