La Fiscalía del Principado Asturias pide una pena individual de dos años de prisión para cada uno de los tres acusados por un accidente laboral registrado en mayo de 2008 en las obras del tramo Salas-La Espina de la autovía A-66, en el que un trabajador resultó herido de gravedad. Los tres acusados son el encargado de la empresa subcontratada para el montaje y desmontaje de los andamios, el capataz de la UTE adjudicataria de la ejecución de la obra y el encargado de la empresa contratada para trabajos de encofrado, que supervisó el desmontaje «sin adoptar las medidas precisas».
Los hechos ocurrieron sobre las 9.00 horas del 23 de mayo de 2008, cuando el trabajador procedía a desmontar un andamio y se precipitó al suelo desde una altura de seis metros. El trabajador sufrió múltiples lesiones, entre ellas traumatismo craneoencefálico grave, lesión cerebral difusa y traumatismo torácico, de las que tardó en curar más de un año. El Fiscal sostiene que los trabajadores carecían de equipos y medios adecuados de seguridad y que no se atendieron los procedimientos e instrucciones del fabricante del andamio. Además de la pena de prisión, el Fiscal solicita que los acusados indemnicen conjunta y solidariamente al trabajador lesionado con 56.000 euros por lesiones y secuelas, más un 10 por ciento como factor de corrección, y en 60.000 euros por la incapacidad permanente, y a la mutua con casi 22.000 euros por los gastos asistenciales.
Dicho hecho es un claro ejemplo de cómo la responsabilidad en caso de accidente recae sobre toda la cadena de subcontratación, cuando contratas-subcontratas y empresario principal no asumen sus responsabilidades en prevención de riesgos laborales y, concretamente materia de coordinación de actividades empresariales
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