El coordinador de actividades empresariales, tiene una formación en prevención como Técnico Superior en Prevención de Riesgos Laborales. En base a lo indicado en el artículo 27 del Reglamento de los servicios de prevención REAL DECRETO 39/1997, “ Para desempeñar las funciones relacionadas en el apartado anterior será preciso contar con una titulación universitaria oficial y poseer una formación mínima acreditada por una universidad con el contenido especificado en el programa a que se refiere el anexo VI”
El INSHT ha realizado, a través de la Universidad de Barcelona, un Estudio de las necesidades formativas en Prevención de Riesgos laborales, ante el nuevo marco docente y los cambios reglamentarios derivados del denominado proceso de Bolonia. Para establecer la base de análisis de la situación actual, se ha trabajado con modelos de encuestas destinados a profesionales vinculados con la prevención de riesgos laborales (PRL), bien por ser técnicos, directivos o docentes, un segundo cuestionario destinado a actuales alumnos de los másteres españoles en PRL y finalmente un tercer cuestionario destinado a posibles futuros estudiantes de un máster en PRL.
Este trabajo, que acaba de ser publicado en su página web, establece un marco de referencia que pueda servir a los responsables académicos en un futuro próximo en la elaboración de planes de estudios en el seno de los Másteres Oficiales que permita disponer de una formación en PRL de una solidez y rigor científico y profesional homologable a cualquier de los países de nuestro entorno.
En los últimos tiempos la aplicación del denominado Proceso de Bolonia ha constituido una verdadera revolución en el marco de la formación universitaria. Las universidades españolas han ido adaptándose a este nuevo marco con distintas velocidades y con distintos niveles de compromiso. Las universidades deben realizar una verdadera modificación de sus sistemas de enseñanza y aprendizaje y ajustarse a los preceptos que Bolonia impulsó en su momento y que siguen vigentes.
Según el estudio presentado, ¿qué modificaciones debería contemplar un nuevo máster en PRL en relación al actual formato para que el Técnico de Prevención tuviera la formación y capacitación necesaria para trabajar en el área de la coordinación?
1. Mejorar la calidad de formación en prevención de riesgos
La formación que se imparte en la actualidad es muy diversa, con conceptos muy genéricos y poco específicos. Es excesivamente teórica y con poco énfasis en la parte práctica. Se le da poca importancia a habilidades formativas y comunicativas de los técnicos. Falta de conocimientos sobre metodología evaluadora de riesgos.
Se propone por ello profundización en las especializaciones y mayor bagaje práctico en la formación, con inclusión de áreas de especialización más profundas:
– Coordinador de Seguridad en Obras de Construcción.
– Especialista en Máquinas o Electricidad.
2. Actualizar los conocimientos del programa formativo en función de las necesidades de las empresas así como de las nuevas valoraciones de los puestos de trabajo.
3. Mejorar las técnicas de evaluación mediante el conocimiénto práctico y teórico en realización de auditorias en PRL e inspecciones de seguridad
4. Incluir en el programa de formación:
– Formación necesaria para ejercer las funciones de un Coordinador de seguridad y salud (según REAL DECRETO 1627/1997), haciendo hincapié en temas legales y su aplicación real en la obra
– Diversificar la especialización en PRL, pudiendo optar al título de Coordinador en seguridad y salud por el titulo de Técnico en PRL
– Dotar de la formación complementaria para actuar como coordinadores se seguridad y salud en obras de construcción a los alumnos con la formación técnica previa, prevista en el R.D 1627/1997 de coordinador de obras en construcción.
– Nuevas tecnologías (informática, multimedia).
Adjunto: Estudio de las necesidades formativas en PRL. PDF
Fuente: Estudio de las necesidades formativas en PRL,ante el denominado proceso de Bolonia. INSHT.